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Las puertas osciloparalelas son un tipo de puerta para jardín y balcón especialmente versátil. Gracias a un mecanismo flexible, combinan la función de deslizamiento de las puertas correderas de hoja con la función abatible de las ventanas estándar. De este modo, permiten una selección más amplia de tipos de apertura. Abrir la puerta para ventilar es especialmente fácil y cómodo con los modelos osciloparalelos; de ahí que las hojas osciloparalelas se utilicen tanto hoy en día, ya sea como modelo clásico de madera, económico de PVC o moderno de aluminio.
Te presentamos un breve resumen de la funcionalidad y los tipos de apertura de las puertas osciloparalelas típicas: la hoja cerrada se abate primero de manera horizontal girando la manilla de la puerta y, finalmente, se separa del marco inferior con otro giro de la manilla. La hoja, que ahora sobresale paralela al marco, se puede desplazar de manera horizontal para abrir o cerrar el hueco de la puerta según sea necesario. Aunque se trata de un proceso relativamente fluido, es posible distinguir a grandes rasgos entre cuatro posiciones básicas:
Todos estos tipos de apertura tienen diferentes ventajas, que hacen de este tipo de puerta corredera uno de los sistemas más versátiles del mercado.
Las puertas cerradas ofrecen protección antirrobo y aíslan eficazmente del calor térmico con el acristalamiento adecuado, como es de esperar. Sin embargo, si tienes en cuenta la compleja mecánica de las puertas osciloparalelas para balcón, te sorprenderá que todas estas ventajas también las ofrezcan los modelos con apertura osciloparalela sin renunciar a nada. Gracias al uso de sofisticados herrajes, las hojas correderas relativamente pesadas de las puertas osciloparalelas se asientan con total seguridad en sus marcos. Además, este tipo especial de apertura no suele ser evidente para los intrusos desde el exterior, por lo que los amigos de lo ajeno a veces optan por métodos nada adecuados para forzar este tipo de puertas.
El tipo de apertura plegable utilizado para estas puertas para balcón se basa, por supuesto, en la ventana oscilobatiente. Esto significa que, cuando está plegada, se produce un intercambio de aire entre el interior y el exterior, pero la puerta sigue ofreciendo una notable resistencia a cualquier intento de robo gracias a la fortaleza de sus herrajes y cizallas.
Las puertas osciloparalelas se pueden equipar con elementos de seguridad adicionales y no tienen nada que envidiar a otros modelos de apertura en cuanto a protección antirrobo. Sin embargo, si sale de casa durante mucho tiempo, es mejor dejar la puerta basculante cerrada.
Si la ventilación con una puerta basculante no es suficiente en pleno verano, pero tampoco quieres la fuerte corriente de aire que supone abrirla por completo, entonces la hoja se puede colocar fácilmente en paralelo al marco de la puerta, todo ello gracias a los diferentes tipos de apertura. De este modo, se consigue una ventilación abundante, conservando la protección frente a las ráfagas fuertes.
Cuando están completamente abiertas, las puertas osciloparalelas, al igual que otras puertas correderas, convencen por su idoneidad en espacios reducidos: dado que la hoja no oscila hacia dentro ni hacia fuera con estos tipos de apertura, no se necesita más espacio. Por ello, estos modelos de puerta también son ideales para espacios reducidos.
Antes de empezar a elegir el material básico, ya sea madera, aluminio o PVC, y los accesorios a la hora de comprar una puerta nueva, hay que tener en cuenta los posibles tipos de apertura, que también desempeñan un papel importante. Las puertas osciloparalelas impresionan por su equilibrada combinación de diferentes posiciones de las hojas, que dan pie a usos que ningún otro mecanismo permitiría.
